Por: Florentino Durán
listindiario.com.do
En la vivienda de Luis Alberto Santana, del barrio San Carlos de La Romana, solo se respiraba tristeza, su madre vio por primera vez la foto de quien tronchó los sueños de su hijo, identificado como Rodolfo Jean Felipe “Nonito”, reproducido en las redes, tras ser publicado en la versión digital de este diario, en un reportaje que se ha hecho viral.
Definitivamente no era el mejor de los días para Francis Berenice Abraham Ballete, madre de Luis Alberto de 20 años de edad, sin embargo agradece los comentarios y reclamos de justicia de los cibernautas, para que Jean Felipe sea procesado, al lamentarse de que un extranjero de origen haitiano, cometa una acción criminal en contra de su hijo, alguien con tantos sueños.
El pasado viernes ocho de mayo, el joven de 20 años fue al colmado a comprar un refresco, cuando fue sorprendido por Nonito y un primo, quien es su vecino. Uno lo agarró y otro le lanzó varios machetazos, uno de los cuales le alcanzó la mano izquierda, la cual le cercenaron.
Santana era un beisbolista con un buen futuro antes del incidente, incluso fue seleccionado para ser visto por varios equipos de las Grandes Ligas, incluidos Baltimore y Atlanta, en los complejos de Boca Chica y en el batey Gautier de San Pedro de Macorís.
El mismo venía entrenando en el estadio al lado del Francisco Micheli, de manos de Frank Ortíz. Tenía el anhelo de ayudar a su madre, de escasos recursos, comprarle una casa y coronarle otros anhelos.
Cuando se le pregunta el origen del desenlace, Luis Alberto quien se repone en su casa y no siempre tiene igual estado de ánimo por razones obvias, no titubea.
“Yo siempre andaba bonito, bien cambiado. Fue por envidia”, exclama Santana quien reveló que su verdugo, un día le amenazó con atracarlo y que se la tenía guardada, sin él provocarlo.
Apenas llevaban siete meses de haberse mudado al sector San Carlos, al lado de la madre de Nonito. Menciona a Soriano como escucha que se ha interesado por sus condiciones para el beisbol.
“Debo seguir adelante. La vida sigue. Doy gracias a Dios porque, me regaló más día de vida y estoy vivo”, sostiene al conversar con LISTIN DIARIO, sobre su situación, tras lo ocurrido. Antes de San Pedro, estuvo unos 14 años en San Juan de la Maguana.
Su madre Francis Berenice, laboraba como doméstica en una villa del Central Romana, pero luego de lo ocurrido a su hijo, no ha vuelto a sus labores, para quedarse a su cuido. Sus escasos recursos son una limitación, pero lo peor es los sueños que han quedado truncados, por la acción criminal, sin justificación y con saña
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